Día 25, ¿Merecemos un mundo mejor?
Un día muy intenso emocionalmente, por un momento casi pierdo mi fe en la humanidad.
Un día muy intenso emocionalmente, por un momento casi pierdo mi fe en la humanidad.
Hoy mi día estuvo lleno de interacciones sociales con mis nuevos amigos, curiosamente fue gratificante, tal vez demasiado, hice mi trabajo pero no hice todo lo que quería hacer, mi mente está abrumada por tantos nuevos recuerdos, me costó pensar siquiera sobre qué escribir. Por otro lado, mi cerebro pide más y más interacción, pues mi apetito por interacciones afines a mí es tan grande como mi sentimiento de soledad.
Un conjunto de aparentes señales de la vida me llevaron a tomar la decisión de comprar un libro. Lo cual me hace preguntarme hasta qué grado fui manipulado y hasta qué grado elijo sacarle provecho a mis propias supersticiones.
La soledad que experimento es multifacética, nacida de una profunda discrepancia entre mis motivaciones y las de quienes me rodean
Después del congreso volví a la ciudad, pero algo era distinto, hay un sentimiento incómodo que no me deja, ¿Será acaso el miedo a lo que viene?
Un día tan intenso que parecieran 4 días en uno. Un día donde muchas cosas en mi vida cambiaron, cosas importantes.
Hoy recibí recompensas por mis acciones del pasado, una material y una ¿Espiritual?
Hoy comencé reflexionando sobre las amistades y me di cuenta que no hay amigos perfectos y no lo necesitamos.
Creo que lo que me hizo más feliz fue poder decirles que estoy encontrando el camino intermedio, entre la ciencia y el emprendimiento, un camino que llevo años buscando y que sin duda estoy feliz de estar recorriendo hoy en día.
Tenemos un objetivo muy importante pero es vital para la consecución de ese objetivo hacer lo posible por disfrutar el proceso, porque nuestra vida es tan solo un pequeño instante para el universo y porque de ahí nace la gratitud que nos impulsa no sólo perseguir nuestras metas, sino a cuidar de los seres vivos a nuestro alrededor
Me siento agotado, ya no puedo pensar con claridad, pero vengo aquí a reforzar el hábito, a dejar un testimonio de mi voluntad por desarrollar disciplina.
Tras un día en extremo agotador me encuentro cansado y con sueño pero refuerzo el hábito que estoy construyendo como un esfuerzo por construir mi disciplina.
Hoy miro al futuro con esperanza y al pasado con alegría y satisfacción.
Al cierre del día 41, me encuentro reflexionando sobre el progreso de este desafío personal. Estoy un poco cansado, pero consciente de que ya hemos avanzado aproximadamente un 18% del camino. Este punto me parece apropiado para evaluar cómo estamos avanzando y qué ajustes podrían beneficiar este proceso de introspección y planificación.