Día 4 ¿Cómo vamos?
15/05/2024 / 50 DíasOk, muy bien. ¿Cómo empezar esta nota? Supongo que viendo el día: estamos en el día 4 de la cuenta regresiva. He estado fallando en mantener mi constancia y en el hábito que había construido. He cambiado unos hábitos por otros. Por un lado, debo escribir más; por el otro, he estado haciendo ejercicio, lo cual es positivo. Pero necesito comprometerme a terminar lo que empiezo antes de asumir más responsabilidades.
Hoy me gustaría hablar sobre cómo van las cosas y cómo ha sido mi vida últimamente. Una gran parte de lo que me sacó de la rutina fue mi ruptura. Como mencioné en notas anteriores, no esperaba que todas las decisiones se tomaran hasta que se cumplieran los 50 días de este desafío. Sabía que algunas situaciones surgirían en el intermedio, y eso fue lo que pasó con mi relación. Terminamos antes de los 50 días. En general, fue una ruptura en buenos términos. Seguimos viviendo juntos porque creemos que a ninguno de los dos le conviene mudarse ahora. He tenido una vida social mucho más activa, retomando viejos contactos y haciendo nuevas amistades.
Sin embargo, creo que debo socializar menos y enfocarme más en mis notas y en los hábitos que quiero construir. Además, necesito ser más estricto con el uso de mis redes sociales, especialmente con las interacciones reales. ¿Para qué quiero la falsa interacción en redes cuando tengo amigos en la vida real?
Las cosas están avanzando rápidamente y hay muchos cambios en mi vida. Me he dado cuenta de que he sido impulsivo últimamente, y eso puede ser una receta para el desastre. Necesito retomar el control, concentrarme, y meditar de manera más constante. Debo calmarme, controlar mis impulsos y reflexionar profundamente sobre quién soy y quién quiero ser. Enfrentaré una situación similar a la que viví en el día uno de la cuenta regresiva, y necesito estar seguro de que estoy alineado con mis principios.
Es crucial que en estos cuatro días restantes reflexione sobre qué aspectos de mi vida son importantes y cuáles no. Debo ser más maduro y controlar mis impulsos para no cometer errores que puedan deshacer el trabajo de meses. Estoy en un buen lugar ahora, y sería una pena perder esta posición por inmadurez.
En resumen, aunque he retomado el ejercicio, lo cual es positivo, necesito volver a practicar la meditación y la gratitud. Ayer no escribí una nota, pero el día 5 asistí a un concierto sorpresa en apoyo a Palestina en Ciudad Universitaria, donde estudio. La banda que se presentó fue Los Cojelones, mi banda favorita en español. Fue el primer concierto donde conocía la letra de casi todas las canciones, y me la pasé increíble. También participé en el slam, aunque fue más agotador de lo que esperaba.
He notado algunos cambios físicos en mi cuerpo últimamente. La piel de mis manos se arruga más fácilmente al contacto con agua, y mis pies se sienten más calientes. No sé si es debido al cambio climático o alguna otra razón, pero es algo interesante para reflexionar.
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